Quiero que sepas
que a pesar del silencio
sigo caminando
entre la hojarasca bajo mis pies.
Que bajo el mismo
sol y la misma luna me llega, aunque tu no lo quieras,
el perfume de los
jazmines que brotan en tu primavera.
Seguiré mi
camino y quizás algún día te cuente, el porque no pude quererte.
Quiero que sepas,
que el otro día, antes de que el otoño comenzará, recogí una
flor.
Y que la guardo
para ti.
Quiero que sepas,
mi gran desconocido, que a pesar del silencio,
sacaré fuerzas
para continuar mi camino, que tengo desgarrado el corazón,
pero no debo
parar, debo seguir mi camino entre la hojarasca de mi país, entre la
hojarasca de mi bello otoñal.
María del Carmen
Aranda